Reflexiones de Rayma

Ese día, el día, cuando partí,o me partieron de mi país, sobre el suelo del Aeropuerto, bañado de colores, en una plataforma Cinética, con el abrazo de Cruz Diez, donde hemos partido todos, familiares y amigos y donde se han quedado en el llanto decenas de madres y abuelas subiendo por Maiquetia. Ese momento, hace dos años, infinito en dolor, en fuerza reconstructiva, en no me van a borrar, en yo si puedo, en ya vuelvo mi amor, en ese instante, cuando mi corazón late, cuando siento que debo estar viva, viva para ayudar, viva para crear, crear otras y es que puedan contar esta tragedia, que puedan narrar este dolor, esta soledad colectiva, este hacerse una maleta cuando nunca supimos empacar el alma. Este momento infinito, que me hace crecer cada día y querer comprender el porque de tanta venganza, la vida se detiene en un suspiro de esos que logramos armar en la distancia.
Inmigrante es mi nueva vida, pasaporte a la solidaridad humana, pensando en las metas que me permitan aportar un grano de arena a una Venezuela libre y unida.
Por: Rayma
@raymacaricatura